Chào bạn,
Bienvenid@ a nhà kanchay, un espacio para generar salud, libertad y consciencia.
El deseo de crear este espacio nació en Vietnam, donde he vivido 13 años, en los que he ido aprendiendo el cuidado, la delicadeza y el respeto que el pueblo vietnamita brinda siempre de forma auténtica y sincera; y esto es lo que le da el espíritu a este proyecto.
Nhà es la palabra vietnamita para casa, que en Vietnam significa siempre un lugar de acogida y encuentro. De aquí el propósito de nhà kanchay: restaurar nuestro hogar interior y de reconexión íntima, para sostener el cuidado, el descanso, la descarga de tensiones, tanto físicas, como emocionales y mentales, la expansión de la respiración, el fortalecimiento muscular, la regeneración de fluidos en los sistemas corporales, el re-equilibrio emocional, la concentración mental y la relajación profunda.
K’anchay es una palabra quechua (lengua andina) que significa luz, luminosidad, brillo. El espacio de acogida, re-equilibrio y descanso que ofrecen las prácticas, propicia un estado anímico equilibrado, luminoso, donde se experimenta mayor vitalidad, libertad, consciencia y paz.
Los saberes ancestrales son esas herramientas de “brillación” interior que nos ayudan a llevar a cabo el trabajo de nhà kanchay: aumentar nuestra vitalidad y nuestra libertad para disfrutar siendo exactamente quienes somos.
Gracias.
Con mucho amor,
Lola

Experiencia
Más de 10 años enseñando yoga
The Yoga Nest Saigon
Maison L’Apothiquaire Saigon
At Ha’s Boutique Yoga Studio Saigon
Más de 8 años facilitando
relajación a través del gong
organizando eventos de yoga y sonido
2 años como coordinadora de Mindfulness:
@ Primary International School HCMC
Estudios certificados
Agradezco inmensamente la sabiduría y la paciencia de mis profesores en este camino:
Tonie Nooyens, líder de Formación de Profesores de Kundalini Research Institute en Asia, que me enseña la sabiduría yóguica desde el año 2013;
Dr. Sundara Raman, de Mountain Top Clinic en Coonor, India, que con mucha paciencia me inició en los saberes de la ciencia ayurvédica allá por el año 2015;
Fredy Conde, de Cuzco, Perú, que durante la pandemia fue una luz (k’anchay) que me inculcó el amor de la espiritualidad andina;
Tom y Abby de Tone of Life en Jubrique, España, que me abrieron la puerta a la experiencia terapéutica y transformadora del sonido ritual.